La alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, negó este miércoles haber recibido una carta de las autoridades de China pidiéndole que se abstenga de publicar un informe sobre presuntas violaciones de derechos humanos en habitantes uigures de la región de Xinjiang.
“No hay una carta de las autoridades chinas, no. La verdad es que hay una carta de países, así como hay cartas de países que me piden publicarlo, hay cartas de países que me piden no publicarlo, eso es algo que es normal”, declaró Bachelet en una conferencia de prensa desde Lima.
La expresidenta de Chile aseguró que su oficina continúa trabajando para actualizar el informe sobre Xinjiang con el que se comprometió y que este se va a compartir antes de que ella deje el cargo con el país en cuestión, siguiendo las prácticas habituales.
Organizaciones defensoras de los derechos humanos y, de manera más discreta, algunos Estados, criticaron severamente las conclusiones que ofreció la alta comisionada de la ONU tras su viaje a China a finales de mayo pasado, ya que consideraron que fueron demasiado blandas y que su visita no permitirá tener una evaluación real de los derechos humanos de la minoría uigur, asentada en la provincia occidental de Xinjiang.
En los últimos años, se ha denunciado que al menos un millón de personas han sido privadas de libertad por parte del Gobierno chino, en presuntos centros de reeducación, unas acusaciones que las autoridades han negado vigorosamente.
El pasado 15 de junio, en una presentación en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra, Bachelet reconoció que no pudo hablar con ningún detenido en los campos de reeducación, pero defendió que durante su visita a China sí que pudo exponer temas de preocupación de derechos humanos a líderes políticos del país.
“No pude hablar con ningún uigur actualmente detenido ni sus familias, pero anticipando esto me encontré con antiguos detenidos que están fuera del país y familias que han perdido contacto con sus seres querido en esa región”, dijo.
También recordó que su oficina ha recogido desde hace tiempo información sobre la situación en Xinjiang de forma remota y que en base a esto publicará el esperado informe sobre la situación de derechos humanos de los uigures, que inicialmente se esperaba para el pasado diciembre.
Bachelet desmintió en junio que la decisión de finalizar su mandato el próximo 31 de agosto tenga que ver con este viaje al país asiático y aseguró que ya comunicó su decisión de abandonar su cargo antes de ir a China.
La alta comisionada de la ONU dio estas declaraciones durante una rueda de prensa en Lima para ofrecer un balance de su visita a Perú, donde se reunió con autoridades de los tres poderes del Estado, así como representantes indígenas, del sector privado y de la sociedad civil para analizar la situación de las libertades fundamentales en el país.