La Cámara de Diputados inició este jueves un nuevo periodo ordinario de sesiones en el que discutirá las polémicas reformas de militarización y de elecciones con las que el presidente, Andrés Manuel López Obrador, espera marcar su legado al final de su sexenio, que termina en 2024.
Entre las iniciativas destaca la que envió el mandatario el miércoles para que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) tome el control operativo y administrativo de la Guardia Nacional, un cuerpo de seguridad que López Obrador creó en 2019 con la promesa de mantenerlo civil.
Los legisladores de oposición han acusado a esta reforma de ser “militarista” porque además impediría que el personal de las Fuerzas Armadas que ahora está en la Guardia regrese a los cuartales en 2024, como prometió López Obrador y consta en un artículo transitorio constitucional en la ley de 2019.
Los Diputados y Senadores también discutirán la controversial reforma electoral que propuso el mandatario en abril pasado para crear el Instituto Nacional de Elecciones y Consultas, y sustituir al Instituto Nacional Electoral (INE), órgano autónomo que surgió para quitar el control de las elecciones al Gobierno.
La iniciativa constitucional también eliminaría 200 diputados y 32 senadores, reduciría el financiamiento de los partidos políticos y redefiniría el concepto de “propaganda” para que el Gobierno se pronuncie durante las elecciones, disposiciones criticadas porque favorecerían al actual partido en el poder.
Al rechazar la reforma, los opositores presentaron en mayo una contrapropuesta que incluye crear el balotaje o segunda vuelta electoral para elegir al presidente, eliminar la “sobrerrepresentación” en la Cámara de Diputados e instaurar elecciones primarias obligatorias para todos los partidos.
El Congreso también tiene pendiente la ley para regular el cannabis recreativo después de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), en junio de 2021, declaró inconstitucional la prohibición absoluta de la marihuana con fines lúdicos y recreativos.
Además, los diputados se confrontarán el lunes por la aprobación del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF), con el que López Obrador pretende priorizar sus programas sociales y megaproyectos como el Tren Maya, la refinería de Dos Bocas y el Corredor Transístmico, todos en el sureste del país.
Confrontación
López Obrador afronta un escenario más adverso que al inicio de su mandato tras las elecciones intermedias de 2021, en las que su alianza de partidos mantuvo la mayoría absoluta, pero perdió la mayoría calificada de dos tercios de la Cámara de Diputados necesaria para reformas constitucionales.
La coalición del presidente suma 277 de los 500 diputados con 203 de su Movimiento Regeneración Nacional (Morena), 40 del Partido Verde, y 34 del Partido del Trabajo (PT).
Mientras que la alianza opositora de partidos tradicionales de “Va por México” concentra 198, con 114 de Acción Nacional (PAN), 69 del Revolucionario Institucional (PRI) y 15 del de la Revolución Democrática (PRD).
Movimiento Ciudadano (MC), que se define como una tercera vía entre ambos bloques, cuenta con los otros 25.
En el Senado, los aliados de López Obrador cuentan con 71 de los 128 escaños, “Va por México” tiene 37, MC posee 11, y los otros cinco tienen un grupo plural independiente.