En una búsqueda desesperada de aliados, José Solís Ramírez, exrector de la Universidad Autónoma Chapingo, llegó esta mañana a la Cámara de Diputados para solicitar a los legisladores de Morena su apoyo después de que fue destituido por la comunidad universitaria el pasado 7 de octubre.
En una asamblea que cumplió con los estatutos del reglamento de la máxima casa de estudios agrícolas, Solís Ramírez fue retirado de su cargo como rector por el Consejo Universitario tras su incumplimiento del pliego petitorio que firmaron miles de alumnos pidiendo incrementos en sus becas -después de que estas fueran retiradas durante la pandemia-, mejores condiciones de infraestructura y alimentación.
En conferencia de prensa, y acompañado de legisladores de Morena encabezados por los diputados Otoniel García Montiel, Hamlet García Almaguer y Emmanuel Reyes Carmona, acusaron a la comunidad universitaria de realizar “una asamblea de dudosa procedencia”.
“Nosotros estamos de acuerdo en que se desarrollen los procesos internos de la universidad, incluyendo la propuesta de destitución de algún rector. En lo que no estamos de acuerdo es en el mecanismo que se utilizó y que es contrario a la legalidad y a los instrumentos de la propia universidad”, declararon.
Por su parte, Hamlet García declaró que los estudiantes violaron los estatutos y la autonomía de la Universidad.
“El asunto es muy sencillo y muy grave, hay una violación a los estatutos de la Universidad de Chapingo”, dijo.
Otoniel García Montiel, quien es al mismo tiempo secretario de la Comisión Desarrollo y Conservación Rural, Agrícola y Autosuficiencia Alimentaria de la Cámara de Diputados, acusó, sin prueba que lo sustentara, al Movimiento Antorchista de una supuesta “injerencia” dentro de la universidad y de estar detrás de la destitución de José Solís Ramírez.
Al tomar el micrófono de la tribuna en la sala de conferencias de San Lázaro, Solís Ramírez relató que “cumplió con las demandas” estudiantiles, sin embargo, se deslindó culpando nuevamente a “grupos políticos” por querer influir y ejercer el presupuesto que se le asigna a la universidad.
“Tenemos un presupuesto aproximado de 3 mil 160 millones de pesos, y en este año se incrementó a 3 mil 200 millones. Ese presupuesto, evidentemente, es un punto de discordia, porque se busca ejercerlo para otros propósitos”, finalizó.
Al ser cuestionado por una periodista sobre qué tiene que ver Antorcha, este quedó callado y desvío el tema.
Estudiantes relataron a esnoticiahoy.com que el problema inició desde que el ahora exrector negaba el regreso a clases presenciales, afectando su formación, muchos de ellos “tuvieron que abandonar sus estudios” porque les quitaron la beca. De la misma manera, denunciaron a Solís de ser él quien tiene pactos con grupos políticos al ser investigado por la Fiscalía General de la República (FGR) por el supuesto delito de desvío de recursos a través de empresas fantasma, esto de acuerdo a la carpeta de investigación FED/ FEMCC/FEMCC-MEX/0000571/2021.