Los presidentes de China y Estados Unidos, Joe Biden y Xi Jinping, respectivamente, han abogado este lunes durante un encuentro en los márgenes de la cumbre del G20 en Bali por fomentar e impulsar la “cooperación” para evitar conflictos y hacer frente a los distintos desafíos globales.
Biden, que ha admitido que Washington seguirá compitiendo con Pekín en materia comercial, ha señalado que “esta competitividad no debe nunca rebasar los límites y llevar a las partes a un conflicto”, tal y como ha informado la Casa Blanca en un comunicado.
Los dos líderes han abordado, además, la importancia de “lograr el desarrollo de principios que permitan avanzar en objetivos comunes” de cara al futuro. “China y Estados Unidos deben trabajar juntos para hacer frente a los desafíos transnacionales, como el cambio climático, la estabilidad macroeconómica, la seguridad en materia sanitaria y la alimentación”, recoge el texto.
Los presidentes han acordado impulsar la comunicación entre las partes a pesar de que Biden ha alertado nuevamente de la situación de los Derechos Humanos en zonas como Xinjiang, Hong Kong o el Tíbet.
Sobre el asunto taiwánes, Biden ha puntualizado que Estados Unidos “se opone a cualquier cambio del ‘statu quo’ en la zona” y ha recordado que el mundo espera que se mantengan la “paz y estabilidad” en el estrecho de Taiwán. Además, ha asegurado que “resolverá los casos de aquellos ciudadanos estadounidenses que han sido detenidos injustamente en suelo chino”.
No obstante, las partes han reiterado su compromiso con la no proliferación de armas nucleares y han destacado que “no debe producirse jamás una guerra nuclear”, al tiempo que ha anunciado que el secretario de Estado del país norteamericano, Antony Blinken, viajará a China para dar continuidad a las conversaciones.
Xi, por su parte, ha insistido en la importancia de que los dos países desempeñen un “papel de liderazgo” a nivel global y ha recalcado que la historia “es el mejor libro de texto”. “Dejemos que haga de espejo y nos guíe hacia el futuro”, ha puntualizado, según ha recogido la cadena CGTN.
El jefe de Estado chino ha expresado que está “deseando trabajar con Biden para encauzar las relaciones entre China y Estados Unidos y lograr un crecimiento saludable y estable que beneficie a los dos países y el mundo entero”.
“En estos momentos se están produciendo grandes cambios que nunca antes se habían visto”, ha aseverado antes de afirmar que “el mundo espera que China y Estados Unidos sepan actuar adecuadamente”. “Tenemos que trabajar junto a otros países para lograr una mayor confianza, estabilidad e ímpetu para el desarrollo común”, ha sostenido.
Primer encuentro desde que juran al cargo
Previamente, ambos mandatarios se han estrechado la mano por primera vez desde que juraron el cargo de cara a un encuentro. Así, los dos se han saludado y han expresado su deseo de mantener las inminentes conversaciones, según informaciones de la cadena de televisión CNN. “Me he comprometido a mantener abiertas las líneas de comunicación entre nosotros personalmente porque nuestros países tienen una oportunidad de abordar muchas cuestiones”, ha afirmado Biden en declaraciones previas al inicio del encuentro.
“Como líderes de estos dos países tenemos la responsabilidad de demostrar que China y Estados Unidos pueden gestionar sus diferencias, prevenir que la competitividad se torne en un conflicto y hallar formas de trabajar conjuntamente en materias globales que requieren nuestra cooperación”, ha aseverado.
Por su parte, el presidente chino ha destacado que el encuentro “ha atraído la atención del mundo” y ha hecho hincapié en que ambos países se encuentran en una situación en que “deben cuidar sus relaciones bilaterales”.
“Como líderes de las principales potencias es necesario seguir el curso correcto de las relaciones entre China y Estados Unidos. Tenemos que hallar la dirección adecuada para desarrollar nuestras relaciones y elevar nuestro vínculo”, ha puntualizado.
En este sentido, ha destacado que el “mundo espera que gestionemos bien esta relación. (…) Tenemos que trabajar para fomentar la esperanza en el establecimiento de la paz, la confianza en la estabilidad global y un mayor desarrollo común”.
El Ministerio de Exteriores del gigante asiático ha señalado que Pekín busca “alcanzar una forma de coexistencia aceptable para las partes mientras defiende su propia soberanía, seguridad e intereses”, según ha recogido el diario ‘South China Morning Post’.
El encuentro se produce tres meses después de que la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, realizara una polémica visita a Taiwán, un asunto que ha avivado la polémica y ha fomentado maniobras militares por parte de China en la zona.