La tarde del miércoles 24 de mayo, un grupo de porros armados con palos, machetes y pistolas, todos pertenecientes a la Unión Popular de Vendedores Ambulantes 28 de Octubre, entraron al Mercado Amalucan a golpear a 10 compañeros antorchistas y una familia completa de locatarios y, además, a punta de palo y pistola, exigieron que todos los vendedores se declararan afiliados a su movimiento. Los que se negaran, no podrían abrir sus locales ni vender en zonas aledañas al mercado. El chiste era que permitieran que la 28 tomara el control total del mercado para extorsionar a los comerciantes, cobrar altas cuotas dinerarias a los locatarios, imponer afuera del mercado a puestos de ambulantes, para hacer, como los sabe cualquier capitalino medianamente enterado, negocios sucios que empiezan con la vendimia de objetos robados y acaban con la venta de drogas y armas. Así sucede en otros mercados que ellos controlan. Y ahora quieren el control de Amalucan. Pero hartos de esta situación, el 80% de los locatarios buscó al Movimiento Antorchista para pedir ayuda. Esto desató la cólera de la 28.
Sin embargo, no contaron con que ese histórico mercado tiene entre sus locatarios a gente valiente que se declaró contraria a la decisión de la 28 de Octubre y que les dijo, pacífica pero enérgicamente: “no queremos que ustedes nos ordenen lo que debemos hacer”, “ya no queremos cobros excesivos”, “ni amenazas”. Eso es justo, ¿o no? Cada uno es libre de afiliarse a la organización que desee, ¿o no? Cada uno puede trabajar en donde quiera, ¿o no? La petición de los locatarios es justa. Pero, desde luego, a quienes dirigieron la operación de asalto en Amalucan no les gustó en absoluto y ordenaron golpear a los rebeldes. Varios comerciantes y sus familias fueron brutalmente golpeados. Hubo varios heridos: unos descalabrados, otros con la cara desecha a golpes y varios con las costillas fracturadas. Todo ha sido denunciado ante las autoridades de justicia, a quienes se les entregaron las pruebas con fotografías y videos que algunos comerciantes lograron tomar. No fue un enfrentamiento, como dijeron los políticos y medios desinformados. Se trató de un ataque directo de la 28 de Octubre, con alevosía y ventaja, contra los locatarios de Amalucan, muchos de ellos integrantes del Movimiento Antorchista.
La mañana del jueves 25 de mayo, los comerciantes antorchistas protestaron frente a las oficinas del secretario de Gobernación, Jorge Cruz Lepe, para exigirle al gobierno municipal que detenga las agresiones de los porros de la 28 de Octubre en el Mercado Amalucan, para exigirle que expulse del mercado, con la fuerza pública, a los malandros que “hacen guardia” para que nadie se rebele, que intervenga de inmediato y que tome el control del inmueble, porque no es de ninguna organización, sino del ayuntamiento y para que logre que se respete el derecho de libre organización de los comerciantes: de los 105 locatarios, 85 son antorchistas por convicción, cero son de la 28 de Octubre. La 28 lleva gente de otro lado y la intenta pasar por locatarios, pero ninguno puede demostrarlo. Los nuestros sí pueden demostrar con documentos del municipio que son locatarios del mercado desde hace más de 40 años. Han pasado los días y todo sigue empeorando: el mercado sigue tomado por los porros y nadie detiene sus crímenes.
El jueves por la noche, el presidente municipal de Puebla, Eduardo Rivera, recibió a una comisión de locatarios de Amalucan y dijo que el municipio iba a tomar el control del mercado y que se le iba a dar solución institucional. Al siguiente día, viernes por la mañana, se dio cita en las instalaciones del mercado el secretario de Gobernación, para darle “certeza, seguridad y garantía de gobernabilidad a los locatarios”. ¿Y qué ocurrió? Nada. Es más, en las narices del secretario y de la Policía Municipal un grupo de porros de la 28 ingresó al mercado para amedrentar a los locatarios, le soldaron las puertas de la oficina de la administración, propiedad del municipio y, por si fuera poco, amenazaron al propio Cruz Lepe.
Continuamos. El mismo viernes por la tarde un grupo de porros de la 28 cachetearon al director de mercados municipal, Julio César González Valencia, y a Conrado García Alvarado, del departamento de mercados municipal, y, por último, el viernes en la noche y el sábado por la mañana el municipio de Puebla mandó al personal de infraestructura para pintar la fachada del mercado y, nuevamente, fueron corridos y amedrentados por el grupo de porros de la 28. Todo esto demuestra que el municipio de Puebla no quiere actuar en contra de la 28, a pesar de que han amedrentado a su mismo personal.
No hay soluciones, pues. Y la duda es: ¿por qué se les permiten las ilegalidades? La 28 de octubre presume por todo lo alto pactos con la Secretaría de Gobernación del estado, para hacer y deshacer a su antojo a cambio de votos y otras mañas cuando así lo requiera el grupo político que ahí manda. Pero el ‘barbosismo’ se está muriendo, como también se sabe. Pero quizá eso “no lo sepan” en el Palacio Municipal y por eso permiten este tipo de actos ilegales y criminales contra los capitalinos.
Este jueves, miles de comerciantes vamos a marchar en la capital para exigirle al gobierno municipal de Eduardo Rivera que resuelva el problema y que ponga alto a las agresiones de los porros de la 28 de octubre contra los comerciantes. Queremos un Mercado Amalucan sin violencia, en donde el gobierno imponga la seguridad para todos y en donde cada comerciante pueda elegir, libremente, a qué organización quiere pertenecer. No es tiempo de rollos y promesas, señores políticos. Es tiempo de actuar.