El Ejército mexicano ha declarado por medio de un comunicado que ha aumentado en número y uso de artefactos explosivos improvisados, los cuales son colocados de manera estratégica en caminos para amedrentar a la población. Los fabricantes son los cárteles del narcotráfico.
De estos artefactos, tan solo este año han resultado heridos 42 soldados, así como agentes de policía y algunos sospechosos ligados al crimen. Esta cifra es comparada con los 16 heridos del 2022.
El secretario de la Defensa, Luis Cresencio Sandoval, informó que se reconoce que al menos un oficial de la Guardia Nacional y cuatro agentes de policía estatal han fallecido a causa de dos ataques este año.
El número de estos artefactos e incidentes han aumentado desde 2020, eso incluye los explosivos transportados en drones. En lo que va del 2023, han registrado 260 incidentes, sin embargo, puede que la cifra sea aún sea mayor, pues, habitantes de las regiones de Michoacán y Guerrero denuncian constantes ataques.
De la misma manera, se han hallado seis coches bomba en lo que va del 2023, cuando en 2022 se reportó solo uno.
De acuerdo con la información proporcionada, se tiene registro de 556 artefactos explosivos improvisados en 2023. Los cuales dejan un total de 2,186 halados durante el sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador.
La mitad de estos artefactos explosivos fueron encontrados en Michoacán, donde el Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG) está involucrado en una guerra contra una coalición de células criminales locales, lo que ha desatado una ola de violencia en esta entidad.