Las necesidades de mejoramiento y ampliación de las redes de agua potable no solo son de Culiacán; menudean las protestas por todo Sinaloa de comunidades enteras por falta del vital líquido.
Pável Calderón Sosa
Decenas de miles de familias se quedaron sin el servicio de agua potable durante varios días durante la semana recién concluida. La prensa local informó de 189 colonias afectadas, entre ellas el sector Alturas del Sur en el que viven 33 mil personas (lineadirectaportal.com, 15 de septiembre de 2023), probablemente la afectación total haya sido para más de 200 mil culiacanenses, quienes se vieron en complicaciones para bañarse, lavar ropa, cocinar, satisfacer las necesidades del hogar.
También la educación, ya muy dañada por la crisis del Covid-19, volvió a recibir varapalo, pues durante uno, dos o hasta tres días diversos planteles tuvieron que suspender clases por la falta de condiciones mínimas de higiene en “103 escuelas donde se suspendió clases en forma temporal, en tanto no se retorne al suministro de agua potable…” (eluniversal.com, 13 de septiembre de 2023); el presidente de la Alianza para el Desarrollo y Competitividad de las Empresas declaró: “La suspensión del servicio de agua potable durante tres días en la ciudad de Culiacán a causa de la ruptura de un tubo que conduce el agua de la planta San Lorenzo a más de 189 colonias de la zona sur, afectó a más de mil comercios de distintos giros, lamentó Julio César Silvas Inzunza.” (lineadirectaportal.com,13 de septiembre de 2023).
Decenas de miles de culiacanenses vieron trastornadas sus vidas durante al menos una semana, perdieron días de trabajo, muy probablemente fueron víctimas de descuentos en sus salarios por dichas faltas; los daños a la economía de las familias deben contarse por millones de pesos pues el abasto en pipas fue totalmente ineficiente y mucha gente debía ver cómo arreglárselas sola.
El diario Debate documentó que el Colegio de Abogados de Sinaloa piden que se condone el pago a los usuarios de la Junta municipal de agua potable y alcantarillado de Culiacán (JAPAC) por los gastos extraordinarios a los que se vieron sometidos (debate.com, 17 de septiembre de 2023); aún no se sabe cuánto habrán perdido los negocios ni qué daños a la salud se habrán ocasionado, entre otros.
La población sufrió importantes daños y, como siempre, los más afectados son los trabajadores de escasos recursos económicos, pues ante gastos imprevistos quienes viven al día se ven en serias dificultades. Los daños reales no se han conocido por la prensa local, y lo más seguro es que no se conozcan, por su potencial para elevar la inconformidad social, que no fue poca.
Lo que está en el fondo de la falta de agua hasta por una semana en colonias de la capital sinaloense se ha dejado ver en medio de la crisis: falta recurso para mantenimiento, para modernización y para ampliación de la red de agua potable de la capital. “El presidente municipal de Culiacán, Juan de Dios Gámez Mendívil, anunció que gestionará mil millones de pesos ante dependencias del gobierno federal para atender el problema que se tiene en la ciudad con las redes de agua potable y con el drenaje pluvial que ya cumplieron con su vida útil, lo anterior, en respuesta a los constantes cortes del servicio de agua potable que se han tenido en los últimos meses (lineadirectaportal.com, 13 de septiembre de 2023)”.
El problema de la ruptura de las tuberías no es nuevo; se ha ido gestando y agravando con el paso de los días dado que no se dispone de recursos suficientes para evitarlo; pero esto es responsabilidad de las autoridades, en primer lugar del gobierno federal que no ha priorizado más que sus obras mega millonarias: trenes, refinería y aeropuerto, a las que ha destinado cientos de miles de millones de pesos. He ahí el problema del agua en Culiacán: se están destinando los recursos a obras de relumbrón, para el lucimiento personal del gobernante que quiere “hacer historia” y no a las necesidades básicas de los mexicanos. El problema que sufrimos en Culiacán no es, como quisieron ver algunos, inevitable ni mucho menos.
Las necesidades de mejoramiento y ampliación de las redes de agua potable no solo son de Culiacán; menudean las protestas por todo Sinaloa de comunidades enteras por falta del vital líquido, y no de ahora, sino desde hace años. Pero el problema no es solo con el agua, el servicio de energía eléctrica también es pésimo en muchos lugares, de esto dan fe de cuando en cuando grupos de pobladores cerrando vías de comunicación para ser escuchados; y de ahí podemos pasar al drenaje pluvial y sanitario, colapsados o inexistentes por todos lados, falta de pavimentos por la mayor parte de las ciudades, sindicaturas y ranchos. La lista de lo que falta en materia de obras y servicios públicos a los sinaloenses no cabe en este espacio.
El colapso de la red de agua en el sur de Culiacán es una consecuencia obligada de la forma en que se gasta el recurso de nuestros impuestos este Gobierno y, con todo lo caótico que fue, no es más que una pequeña probadita de los males que nos esperan si se sigue con la actual política del gasto.
La solución está en que se administre mejor el recurso público y que se capten más dineros por la vía de una reforma fiscal progresiva, para abatir a prisa las grandes carencias sociales; esto, poniendo en el centro de todo la satisfacción de las necesidades elementales de las mayorías, entre las que están agua, energía eléctrica, y educación.
¿Qué gobierno se presume humanista de palabra, pero en los hechos niega servicios básicos de calidad a sus gobernados? Cada vez más gente debe saberlo, organizarse sólidamente y llevar al poder a un partido que enarbole estas banderas, que sepa cómo resolver el problema de raíz y lo resuelva. No nos engañemos, a la luz de los hechos, esto sigue siendo un gran pendiente.
Entretanto, todos los que quieran unirse para exigir desde ahora más y mejor agua, organícense y luchen con el Movimiento Antorchista.