En Charcas, municipio minero del semidesierto potosino, persiste un sinfín de problemas sociales derivados de la falta de obras de infraestructura pública, como agua potable, drenaje, electrificación, caminos, carreteras y calles pavimentadas, hospital de especialidades y escuelas del nivel superior, entre otras tantas, que afectan a sus 21 mil 138 habitantes en las 246 comunidades dispersas.
Dos de los servicios urbanos más urgentes para la población de Charcas son el agua potable y el drenaje. De acuerdo con datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), el 46.8 por ciento de pobladores de Charcas (ocho mil 359 personas) habitan viviendas que carecen de estos servicios y el 63.5 por ciento del total de la población, es decir 11 mil 337, padecen algún grado de pobreza.
Pese a los esfuerzos que el exalcalde antorchista, Manuel López Lara, durante su último año de administración, para dotar a la población de agua potable mediante su reparto por camiones cisterna, los charquenses resintieron la eliminación de los dos mecanismos gubernamentales que podían haberles satisfecho esa demanda y la del drenaje: el desaparecido Ramo 23 del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) y el Fondo Minero.
Ambos instrumentos de distribución indirecta del ingreso fueron eliminados de un plumazo por la actual administración federal, en detrimento de las comunidades sociales más pobres y marginadas del país. Por ello, en su reciente visita a Charcas, la población insistió en demandar a AMLO que devuelva el Fondo Minero a los pobladores y vecinos de Cerro de San Pedro y Villa de La Paz, también pertenecientes a San Luis Potosí.
En el territorio de Charcas se explotan productos minerales como oro, plata, zinc, cobre, plomo, ónix y mármol. Grupo México, empresa que pertenece al multimillonario Germán Larrea, extrae 59 mil toneladas de zinc de la mina de Charcas donde, además, mantiene una explotación de cobre y una planta de refinación de plata. Ésta es la razón por la que los habitantes del municipio consideran injusto e incongruente que ahora se les nieguen recursos del Fondo Minero.
Don Francisco Marfileño Puente, quien se dedica a la minería desde hace 34 años en Charcas, afirmó “Recuerdo que el recurso del Fondo Minero fue una gran noticia para los habitantes de este municipio, sobre todo para quienes laboramos en esta rama, ya que es una manera de devolverle un poco a la naturaleza, a la tierra que trabajamos. Así vimos materializado el recurso en obras de pavimentación, resaltando la calle Morelos, una de las principales en la cabecera municipal. Nos quedó claro que este recurso llega a los municipios con actividad minera con el objetivo de mejorar las condiciones de vida de los habitantes, con obras y servicios para el desarrollo del pueblo”.
“Hace algunos meses nos enteramos por las noticias que AMLO retiraría el apoyo del Fondo Minero, o al menos ésa era su intención. Ahora el recurso está detenido, lo que afecta el progreso de Charcas. Necesitamos muchas obras, pavimentaciones, drenaje y agua potable; escuelas, electrificaciones, servicios médicos. En fin, pedimos al Gobierno Federal que, si no nos da, tampoco nos quite lo que ya teníamos. Seguimos esperando que regrese el recurso”, advirtió el señor Marfileño Puente.
Mientras el Gobierno Federal se decide a devolver el Fondo Minero, los habitantes de municipios que viven de las actividades extractivas continúan en la incertidumbre, con menos apoyos para la construcción y mantenimiento de infraestructura básica, que resulta indispensable para la satisfacción de los servicios más elementales, alimentación y desarrollo sanitario.
Con información de Erika Herrera