«Que quede claro, que no haya duda: vengo por Campeche. Estoy decidida. Me uno con la misma pasión indeclinable a ustedes, para luchar por la Cuarta Transformación que encabeza nuestro líder Andrés Manuel López Obrador, para que en este estado se consolide. Nuestro pueblo generoso lo merece».
Con estas palabras, la aún alcaldesa Layda Sansores confirmó lo que era un secreto a voces. Lo cual no despeja las dudas de quién podría reemplazarla en el cargo. De inicio se habla del interinato, el cual tiene nombre y apellido: Erick Reyes, director general de Gobierno. Lo anterior, claro, si la lideresa marrón no decide llevárselo a Campeche, como también se especula.
Según se pudo saber, la candidatura de la 4T en Álvaro Obregón es primordial para el Antiguo Palacio del Ayuntamiento. Pues se trata del bastión de uno de los enemigos históricos del lopezobradorismo en la capital, tierra del cacique Leonel Luna, experredista y hoy aliado al Partido Verde.
Por ello, la diputada federal Lorena Villavicencio Ayala -cuya proyección a nivel local es la de una activista a favor de los derechos de las mujeres- ya se ha acercado a los líderes de Morena en el Congreso de la CDMX y en la Jefatura de Gobierno para estudiar su postulación. Hasta ahora, sin mayor consecuencia.
Otra que levantó la mano es Valentina Batres, hermana del senador de Morena, y lideresa de una tribu al interior del grupo parlamentario local de Morena. Aún no ha conseguido el respaldo de la alcadesa, como supo La Política Online de los operadores de Layda. Pero su peso político en la demarcación podría acabar con cualquier posibilidad de una triple gestión de Luna.
En alianza táctica con Eduardo Santillán, como una fórmula en espera de que se decida el género de la candidatura de la 4T para la alcaldía, este grupo rivaliza con la aspirante que promueve la tribu de José Luis Rodríguez, vicecoordinador de la bancada, y que no es otra que Isabela Rosales, expresidenta del Congreso.
Con información de La Política Online