En los días aciagos que corren, tanto en México como en el mundo, llevar el arte y la cultura a los mexicanos que sufren carencias de todo tipo en pleno siglo XXI, es considerado por el Movimiento Antorchista Nacional (MAN) no solamente como un bálsamo que alivie, aunque sea momentáneamente, sus pesares, sino también y sobre todo, como un instrumento para educar y sensibilizar al hombre, de manera que comprenda la razón profunda de su situación en esta sociedad y se solidarice con aquellos que, como él, padecen los mismos males, se hermanen y luchen juntos para que todos sus derechos dejen de ser letra muerta en nuestra Constitución y realmente se cumplan en los hechos. Así se explican nuestra perseverancia y firmeza para cumplir con este objetivo.
En ese sentido, a tan sólo unos días de celebrarse el Día Mundial del Teatro, el MAN realizará su XXII Encuentro Nacional de Teatro los días 24, 25 y 26 de este mes, en el Centro Cultural Mexiquense Bicentenario, ubicado en Texcoco, Estado de México. La entrada, como lo ha sido en todos nuestros eventos, será gratuita, de tal manera que todo aquel que desee pasar unas horas disfrutando de las puestas en escena, podrá hacerlo sin la preocupación de no tener dinero para adquirir un boleto. Esto es importante, pues según datos del Inegi, en el lapso de un año (de mayo de 2021 a mayo de 2022), el 44 por ciento de hombres y mujeres consideró la entrada a bajo costo para acudir a algún evento cultural. Con nuestros eventos, no sucede lo mismo, pues jamás hemos lucrado ni con la cultura ni con nada, como lo puede certificar cualquier miembro de nuestro Movimiento. Tampoco hemos recibido subsidio de nadie, sea de particulares o de entidades oficiales; nuestro trabajo cultural, deportivo y político lo sostenemos nosotros mismos a través de colectas, actividades económicas y negocios lícitos de regular tamaño. Esa independencia económica es la que nos ha mantenido fuertemente unidos y trabajando sin cesar contra viento y marea.
Y ¿qué ha hecho el gobierno de la 4T en relación con la cultura? Lo que ha hecho, a pesar de contar con dinero público, es decir, de los mexicanos, ha sido recortar cada vez más el presupuesto destinado a la cultura. El recorte presupuestal viene desde el año 2019, cuando se le destinó un siete por ciento menos que en el año previo; para el 2023, el presupuesto aprobado para el Ramo 48, que corresponde a la Cultura, aunque significó un incremento nominal de 896.5 millones de pesos en comparación con el presupuesto de 2022, considerando el factor inflacionario, en términos reales, dicho incremento fue de apenas el 0.9 por ciento. De ese tamaño es la importancia que tiene para el presidente López Obrador la cultura, pues no olvidemos que el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2023 se aprobó “sin quitarle ni una coma”.
Hay que tomar en cuenta que en las áreas de la cultura, el Inegi considera bajo el concepto “artes escénicas y espectáculos”, los eventos y espectáculos culturales en vivo relacionados con el teatro, la danza, la ópera, espectáculos artísticos y culturales en general, incluidos los deportivos, de ahí que en el año 2021 dicho concepto haya sido el que obtuvo el mayor crecimiento, con 22.5 por ciento. Sin embargo, si nos remitimos al Módulo sobre eventos seleccionados 2022 (publicado por el Inegi el 20 de julio de 2022), vemos que la población de 18 años y más en ciudades de 100 mil y más habitantes que asistió al teatro, pasó de 12.3 por ciento en mayo de 2019 a 4.7 por ciento en mayo de 2022, casi un 8 por ciento menos. El teatro, como espectáculo privado va, pues, en caída libre.
Pero no así el teatro que promueve e impulsa el MAN a través de su Comisión Cultural. En esta edición XXII del Encuentro Nacional de Teatro, tendremos la oportunidad de presenciar 20 puestas en escena, entre las que seguramente estarán comedias y tragedias de grandes dramaturgos, interpretadas por las compañías y grupos de teatro que resultaron ganadores después de eliminatorias en sus estados, cuyos integrantes han venido trabajando y puliendo desde hace ya varios meses la pieza teatral que nos presentarán. ¡Asistamos con gusto a recibir una buena lección cultural! En mi caso, no sale sobrando y, sin el ánimo de ofender a nadie, creo que para muchos tampoco. ¡Ahí nos vemos!